Esto no pretende ser una noticia objetiva, ya que lo que quiero hacer, es contar desde mi perspectiva la experiencia de transmisión del Congreso Nacional de Educación el día de ayer, por parte del Canal6, como miembro del canal y no como voz única.
La oportunidad de transmitir on-line este Congreso, se nos presentó en un momento en el que pocos en el canal (por no decir que sólo uno de nosotros) sabía qué cosas había que hacer para transmitir, pero como la oportunidad estaba, nos tiramos a la piscina. Durante la semana aprendimos a usar los programas, a instalar las cámaras, a configurar el sonido, a grabar la transmisión, cosas que no habíamos aprendido antes ya que no teníamos la necesidad de hacerlo. Los percances no fueron pocos, desde que se nos quemó un equipo y tuvimos que cambiarlo, hasta que no supimos sino hasta el mismo sábado, cómo era el espacio físico en que tendríamos que transmitir.
Así que esto se convertía en un doble desafío. El primero, el de un canal inexperto en producción, pero con ganas de sacar las cosas adelante, y el segundo, el de transmitir un congreso en el que debido a su magnitud y a que hace mucho que no se hacía algo de este tipo, todo se iba resolviendo en el acto y nosotros teníamos que ir adecuándonos a eso.
Pero las cosas fueron saliendo bien, quizás no fue un gran salto en cuanto a transmisión ya que no logramos una gran masividad, pero fue un paso importante, aprendimos que si se quiere se puede, aunque resulte agotador, y aprendimos todos, nos entendimos necesarios y prescindibles, y esto es importante ya que nos constituye como equipo, el equipo los necesita a todos porque se construye de todos, pero si alguno no puede, igual se lleva a delante la tarea, se puede, pero la ausencia se siente. Los que no estaban ayer (por razones legítimas) no fueron prescindibles para que la transmisión saliera adelante, pero hicieron mucha falta. Canal6 está hoy en un bonito camino de trabajar desde el compromiso y la amistad, trabajar porque nos hace feliz trabajar en esto, aunque signifiquen menos horas de sueño, aunque signifique que no haya tiempo para estudiar con calma, Canal6 ha resultado el puerto donde visibilizar los trabajos que hacemos cotidianamente en distintas áreas, han estado muy presentes las temáticas medioambientales, poblacionales, indígenas, políticas y estudiantiles entre nuestros contenidos, entre nuestras discusiones, entre nuestro quehacer.
Hemos conocido mucha gente, en las reuniones con otros medios nos dicen siempre que llegamos apatotados a todas partes, porque lo cierto es que somos apatotados, no hay alguien que esté más interesado en el canal y que los otros lo siguen, somos como un grupo de hermanos curiosos que comienzan a descubrir el mundo de las comunicaciones. No pretendemos ser ÉL medio de comunicación, sino que dar a conocer lo que está en nuestro entorno, aunque el concepto de entorno no lo tenemos aún claro, a veces es la escuela, a veces lo universitario, a veces lo estudiantil, a veces lo social, a veces lo político, a veces santiago, a veces chile y otras veces latinoamérica o el tercer mundo. No está claro, pero lo importante es que si contamos algo, es porque nos sentimos parte de ese algo. Y transmitir el Congreso de Educación no fue porque alguien nos pidiera que lo hiciéramos, sino porque de cierta forma nos sentimos parte del Congreso (unos más que otros).
Lo sucedido en el Congreso creo que tiene muchas formas de verse, por un lado fue importante ver que somos una masa no despreciable la que quiere juntarse, pensar la educación, democratizar la educación, el conocimiento. Conocer a actores importantes de otros espacios va significar una articulación más eficiente en el corto y mediano plazo, y en el largo plazo significa establecer confianzas y sentirse (entenderse) movimiento y no individuo. El lado b del Congreso, desde mi perspectiva va por el ambiente de lucha descarnada que se da, la falta de respeto con las que en las plenarias se abuchean las propuestas que nacieron del debate. No entiendo a los grupos que desvalidan una idea cuando no son capaces de ganarla en el debate, creo que ese tipo de "izquierda" sólo lleva la política a la atomización, al desprestigio y a la desmotivación del estudiantado, al que se le muestra que no es necesario discutir para establecer una postura, sólo se debe desligitimar el espacio de discusión y gritar harto y fuerte. Ese asambleismo que no se traduce en la recopilación de posturas, sino al establecimiento de la idea de que grita más fuerte, va en contra de todas las formas de generación de comunidad, y es una muestra más del individualismo (disfrazado esta vez del cordero izquierdista).
Pero prefiero quedarme con los avances, con el establecimiento del consenso y el trabajo en torno a este. Como movimiento estudiantil nos queda mucho por crecer todavía para poder avanzar significativamente, pero al menos vamos avanzando mientras tanto, pasito a pasito.
Paso a paso vamos construyendo el canal.
La oportunidad de transmitir on-line este Congreso, se nos presentó en un momento en el que pocos en el canal (por no decir que sólo uno de nosotros) sabía qué cosas había que hacer para transmitir, pero como la oportunidad estaba, nos tiramos a la piscina. Durante la semana aprendimos a usar los programas, a instalar las cámaras, a configurar el sonido, a grabar la transmisión, cosas que no habíamos aprendido antes ya que no teníamos la necesidad de hacerlo. Los percances no fueron pocos, desde que se nos quemó un equipo y tuvimos que cambiarlo, hasta que no supimos sino hasta el mismo sábado, cómo era el espacio físico en que tendríamos que transmitir.
Así que esto se convertía en un doble desafío. El primero, el de un canal inexperto en producción, pero con ganas de sacar las cosas adelante, y el segundo, el de transmitir un congreso en el que debido a su magnitud y a que hace mucho que no se hacía algo de este tipo, todo se iba resolviendo en el acto y nosotros teníamos que ir adecuándonos a eso.
Pero las cosas fueron saliendo bien, quizás no fue un gran salto en cuanto a transmisión ya que no logramos una gran masividad, pero fue un paso importante, aprendimos que si se quiere se puede, aunque resulte agotador, y aprendimos todos, nos entendimos necesarios y prescindibles, y esto es importante ya que nos constituye como equipo, el equipo los necesita a todos porque se construye de todos, pero si alguno no puede, igual se lleva a delante la tarea, se puede, pero la ausencia se siente. Los que no estaban ayer (por razones legítimas) no fueron prescindibles para que la transmisión saliera adelante, pero hicieron mucha falta. Canal6 está hoy en un bonito camino de trabajar desde el compromiso y la amistad, trabajar porque nos hace feliz trabajar en esto, aunque signifiquen menos horas de sueño, aunque signifique que no haya tiempo para estudiar con calma, Canal6 ha resultado el puerto donde visibilizar los trabajos que hacemos cotidianamente en distintas áreas, han estado muy presentes las temáticas medioambientales, poblacionales, indígenas, políticas y estudiantiles entre nuestros contenidos, entre nuestras discusiones, entre nuestro quehacer.
Hemos conocido mucha gente, en las reuniones con otros medios nos dicen siempre que llegamos apatotados a todas partes, porque lo cierto es que somos apatotados, no hay alguien que esté más interesado en el canal y que los otros lo siguen, somos como un grupo de hermanos curiosos que comienzan a descubrir el mundo de las comunicaciones. No pretendemos ser ÉL medio de comunicación, sino que dar a conocer lo que está en nuestro entorno, aunque el concepto de entorno no lo tenemos aún claro, a veces es la escuela, a veces lo universitario, a veces lo estudiantil, a veces lo social, a veces lo político, a veces santiago, a veces chile y otras veces latinoamérica o el tercer mundo. No está claro, pero lo importante es que si contamos algo, es porque nos sentimos parte de ese algo. Y transmitir el Congreso de Educación no fue porque alguien nos pidiera que lo hiciéramos, sino porque de cierta forma nos sentimos parte del Congreso (unos más que otros).
Lo sucedido en el Congreso creo que tiene muchas formas de verse, por un lado fue importante ver que somos una masa no despreciable la que quiere juntarse, pensar la educación, democratizar la educación, el conocimiento. Conocer a actores importantes de otros espacios va significar una articulación más eficiente en el corto y mediano plazo, y en el largo plazo significa establecer confianzas y sentirse (entenderse) movimiento y no individuo. El lado b del Congreso, desde mi perspectiva va por el ambiente de lucha descarnada que se da, la falta de respeto con las que en las plenarias se abuchean las propuestas que nacieron del debate. No entiendo a los grupos que desvalidan una idea cuando no son capaces de ganarla en el debate, creo que ese tipo de "izquierda" sólo lleva la política a la atomización, al desprestigio y a la desmotivación del estudiantado, al que se le muestra que no es necesario discutir para establecer una postura, sólo se debe desligitimar el espacio de discusión y gritar harto y fuerte. Ese asambleismo que no se traduce en la recopilación de posturas, sino al establecimiento de la idea de que grita más fuerte, va en contra de todas las formas de generación de comunidad, y es una muestra más del individualismo (disfrazado esta vez del cordero izquierdista).
Pero prefiero quedarme con los avances, con el establecimiento del consenso y el trabajo en torno a este. Como movimiento estudiantil nos queda mucho por crecer todavía para poder avanzar significativamente, pero al menos vamos avanzando mientras tanto, pasito a pasito.
Paso a paso vamos construyendo el canal.
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