miércoles, abril 14, 2010

el cotidiano

mi día está tan lleno de vos, rostros de vos diría benedetti, perro viejo que tuvo que morirse, demostración de que la vida es tremendamente injusta y de que la única certeza que podemos tener es la muerte, pero vamos y como sigue vivo y jodiendo, que de ida un poema, de venida un libro y anda así, ocupando mis pensamientos al caminar por las calles de santiago y encontrarles el color entre tanto gris... ay mario, si tan sólo estuvieras en algún lugar más que el libro en el que escribo la dedicatoria,
pero fuera de la melancolía esa, decía yo que mi día está lleno de vos, los espacios, las ideas, los pensamientos, se van ligando en ti, te busco, me buscas y logramos coincidir con una disposición absoluta, en horarios que no existen, haciendo dos o tres cosas a la vez...
pienso en ti y es una alegría, un carnaval, una suma de colores dispersos en el calendario, eres increíble, más de lo que yo podría pedir...
Descubrirte, ha sido un universo, conocerte es como ver ese universo con el microscopio y darse cuenta de que cada espacio, cada pequeñez, es hermosa, cada sutileza, cada canción, cada suspiro, cada libro, cada poema, cada mirada, cada mensaje, cada sonrisa, cada idea... todo es un universo en si mismo..
Encontrarte en cada uno de esos espacios ha sido también encontrarme, y se nota, es elegir el libro cada mañana, es despertar y dormir con una sonrisa en el rostro, es aprovechar cada minuto del día en algo, es disfrutar la música, elotoño que ya invade la ciudad, pisar las hojas y disfrutar como crujen, ver el atardecer aunque sea lleno de autos, entrar al cine en una tarde que ya es de noche y con frío... tomarte la mano y apretarla fuerte, muy fuerte...



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